PERTE Agua Costa del Sol

HIDRALIA y ACOSOL, junto a los Ayuntamientos de Marbella, Estepona y Benahavís, presentan un PERTE para mejorar la resiliencia y la transformación digital del ciclo del agua en la Costa del Sol Occidental.
 

Las entidades que representan los tres modelos de gestión del agua (pública, privada y mixta) colaboran para preservar los recursos hídricos de la Costa del Sol, mejorando la eficiencia de las redes, la calidad del agua y minimizando el impacto ambiental de la gestión del recurso hídrico, gracias a la digitalización de sus procesos.

El objetivo del PERTE (Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica) presentado es mejorar la resiliencia hídrica de la Costa del Sol Occidental a través de un mayor conocimiento en tiempo real y detallado de las diferentes fases del ciclo del agua, mediante la monitorización continua y la aplicación de Inteligencia Artificial para maximizar la eficiencia de los procesos ligados al recurso.

HIDRALIA y Aguas de Benahavís, empresas que gestionan el ciclo integral del agua en tres de los municipios más representativos de la Costa del Sol como son Marbella, Estepona y Benahavís, y ACOSOL, operador público que se encarga de la distribución en alta y depuración de los 11 municipios de la Costa del Sol Occidental, además de ser la concesionaria del servicio de abastecimiento domiciliario en varias localidades de la comarca; han presentado de forma agrupada el PERTE del agua de la Costa del Sol para conseguir preservar los recursos hídricos de esta zona, caracterizada por ser un escenario de estrés hídrico creciente y sometida a los variables efectos del cambio climático.

Esta propuesta, que se enmarca dentro de los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE), tiene un presupuesto de 16.254.643 €, de los cuáles se solicita una subvención de unos 10 millones de los fondos europeos Next Generation, para favorecer la resiliencia hídrica de la Costa del Sol Occidental a través de la transformación digital del ciclo urbano integral del agua en la región, donde la escasez hídrica es estructural. Se prevé que, con esta iniciativa, se beneficien alrededor de 565.000 habitantes, aunque la población de la Costa del Sol varía de tal manera durante la época estival que podría llegar a superar las 1,2 millones de personas.

Para lograr la transformación digital se propone sensorizar los puntos estratégicos del sistema global (desde la captación del recurso hasta su devolución al medio natural) para sacar el máximo partido de la tecnología actual, incluyendo el uso de sistemas expertos e Inteligencia Artificial en cada fase del ciclo integral del agua. Esta sensorización conseguirá datos objetivos y, por tanto, un mayor conocimiento en detalle y en tiempo real de las diferentes fases del ciclo del agua. La monitorización de los principales parámetros hídricos y su análisis permitirá maximizar la eficiencia de los procesos ligados a la gestión del recurso.

Así mismo, el posicionamiento estratégico en la telelectura, permitirá subvencionar la colocación de más de 17.000 contadores inteligentes a nuestros clientes (un 12.5 % del actual parque de contadores), doblando así el actual número de clientes que disponen de este servicio ahora más cercano a los abonados, sin importar limitaciones por el idioma.

Estos usuarios a través de la telelectura podrán consultar en su espacio personal los consumos realizados hasta el día anterior, en frecuencias diaria y horaria, la creación de alertas para detectar con celeridad consumos anómalos en el suministro, avisando a los clientes de posibles fugas o de consumos excesivos.

HIDRALIA cuenta con la experiencia exitosa de la gestión digital del ciclo del agua en Marbella, Estepona y Benahavís que ha permitido mejorar notablemente el rendimiento de las redes en los últimos años.      

En la apuesta por la digitalización, destaca DINAPSIS Costa del Sol como piedra angular. Este hub operativo ofrece una suite de soluciones digitales, a través de algoritmos más inteligentes, para optimizar la gestión y mejora del mantenimiento y la conservación de las infraestructuras, la preservación de los recursos hídricos a través del control de los pozos de captación, la reducción de fugas y el control de la calidad del agua al tener monitorizada en tiempo real toda la red, el control exhaustivo de los consumos por medio de la telelectura y la gestión del trabajo a través de una planificación centralizada, lo que también permite reducir las emisiones en los desplazamientos.

En definitiva, un cerebro digital al servicio del agua que hace posible la toma rápida de decisiones ante imprevistos, así como avanzar en el desarrollo sostenible de las localidades y mejorar su resiliencia, al reaccionar ante crisis climáticas de manera inmediata y coordinada para reducir la afectación a la ciudadanía.

Esta experiencia se pretende replicar ahora en el resto de los municipios de la Costa del Sol Occidental a través de este proyecto, transformando los procesos para poner a las personas en el centro y aplicar soluciones pensadas para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía y la resiliencia de las ciudades.      

Por otro lado, el proyecto busca definir la estrategia digitalización para la Costa del Sol Occidental orientada a permitir la integración de los datos que se generen a lo largo de todo el ciclo del agua.      

Esto posibilitará a las administraciones ofrecer un servicio más transparente, eficaz y sostenible con el medio ambiente, ya que esos parámetros que se recojan a lo largo de toda la red se incluirán en un datalake o lago de datos que servirá, no solo para mejorar el ciclo del agua, sino para identificar y solucionar otro tipo de necesidades que puedan tener las ciudades. Todos esos datos se pondrán al servicio de las distintas entidades para poder nutrir estrategias de gestión conjunta.

También se ejecutarán proyectos dirigidos a la optimización del consumo energético y a la mejora de la ciberseguridad.

El proyecto, además, presenta un escenario innovador de gestión colaborativa público-privada entre las tres entidades, que representan además tres tipologías de gestión distinta. Por un lado, HIDRALIA, una empresa privada que gestiona el ciclo del agua en los municipios de Marbella y Estepona; por otro, ACOSOL, operador público de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental; y por otro, Aguas de Benahavís, como un modelo mixto entre HIDRALIA y el Ayuntamiento.

“Es una gran oportunidad para avanzar hacia una gestión más inteligente del ciclo integral del agua, de gestionar más y mejor las captaciones, la eficiencia de las redes o las aguas regeneradas, aprovechando las sinergias entre Ayuntamientos y los operadores en una zona de estrés hídrico como es la Costa del Sol en Málaga, a través de la colaboración público – privada como ejemplo de motor de cambio y modernización en un mundo cada vez más globalizado”, ha indicado Fulgencio Díaz, gerente de Hidralia en la Costa del Sol.

Por su parte, Carlos Cañavate, ha señalado que “sin duda alguna, los PERTE suponen un reto y una posibilidad de mejora cuantitativa y cualitativa en materia de digitalización e innovación que facilitará a los gestores del agua nuestra labor y que repercutirá e impactará en los municipios a los que damos servicio y por ende de forma directa a los ciudadanos, ya que gracias al nuevo modelo de gestión los servicios que prestamos en el ciclo integral del agua serán más eficientes, operativos y sostenibles”.

Para la elaboración del proyecto se ha contado con el apoyo de grupos de interés relevantes dentro del ecosistema de la Costa del Sol, tales como el Centro Tecnológico del Agua Cetaqua Andalucía, la UMA a través del Vicerrectorado junto al apoyo del Centro de Hidrogeología, la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental, la Asociación ProDunas, Fundatul, CD Jacamar, Cruz Roja, Asociación Marbella Activa, Colegio de Ingenieros de Caminos Canales y Puertos de Andalucía Ceuta y Melilla, Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía, además de los municipios integrados.